15 de Noviembre de 1962. Sports Arena, Los Angeles, California. El profeta Cassius Clay dice: “Don’t block the aisle and don’t block the door. I’ll say it again, I’ve said it before, Archie Moore will fall in four”
No bloqueen los pasillos/ni bloqueen la puerta/lo digo otra vez, lo dije antes/Archie Moore caerá en cuatro
Archibald Lee Wright, ‘La Vieja Mangosta’ y Archie Moore en el ring, el hombre con mayor cantidad de nocauts en la historia del boxeo, tiene casi 50 años y sucumbe en cuatro rounds, tal y como el Clay de solo 20 había profetizado. Es el final de la carrera de Moore, quien había debutado en el ring en 1935, siete años antes de que naciera la leyenda de Louisville.
Los cronistas de boxeo no se ponen de acuerdo sobre la fecha exacta en la que se inició la carrera de Moore. Decía el propio Archie que antes del debut del 3 de setiembre de 1935 consignado en la mayoría de los records oficiales, ya había realizado una docena de peleas bajo el alias Fourth of July Kid y que había aprendido a boxear en el reformatorio donde fue enviado por dos años luego de ser sorprendido robando en un tranvía de Saint Louis.
Lo cierto es que una tarde de la primavera de 1935, en el teatro municipal de un somnoliento pueblo de 10 mil habitantes en las praderas de Missouri de nombre Poplar Bluff, Archie estaba entre los espectadores de una velada de boxeo concertado por los promotores locales Allen Matthews y Benny Deathpaine. Un peleador de New Hampshire de nombre Billy Simms había noqueado al crédito local en menos de tres minutos y ante el abucheo de los presentes, Moore se ofreció de voluntario para subir al ring y resarcir la afrenta. ‘The Old Mongoose’ noqueó al intruso en 2 rounds, dando inicio a una de las historias más fantásticas en la historia del pugilismo.
Pero el camino hacia el título de los semipesados fue largo y tortuoso. Algunas veces, cuenta el desaparecido historiador de boxeo Hank Kaplan, el monto de su bolsa era lo que se recolectaba pasando un sombrero entre los espectadores –como en una misa de domingo– de pueblos recónditos de todos los Estados Unidos. En ese camino pasó por Australia, donde puso a dormir a seis de los siete rivales que le pusieron al frente y por el Río de la Plata, donde le bastaron 45 segundos para aniquilar al ex campeón argentino y sudamericano de los pesados, Alberto Lovell. Solo una semana después, Archie se presentó en una sala de cine llamada 'Boston' en Montevideo e hizo que la paliza a la que estaba sometiendo a su rival obligara a la esquina a tirar la toalla antes de empezar el sexto asalto. La víctima de turno era el campeón peruano de los pesos pesados y se llamaba Vicente Quiroz.
moore vs maxim, 1953. foto: BOXREC.com
A pesar de estar considerando entre los mejores del mundo por la revista The Ring desde 1940, a Moore le tomó 18 años y 159 peleas profesionales obtener la opción de tentar por el cinturón mundial. Con 39 años de edad, su record la noche del 17 de Diciembre de 1953 en la Arena Saint Louis frente al campeón Joey Maxim era de 132 victorias (¡97 por nocaut!) y 19 derrotas. Frente a su público, Moore venció a Maxim sin atenuantes por decisión unánime en 15 rounds, y retuvo el título hasta 1961 cuando tenía 48 años. Su defensa frente al canadiense Yvon Durelle está grabada en los libros de historia del boxeo como una de las mejores y más emocionantes de todos los tiempos. Luego de ser tumbado cuatro veces, Archie se levantó para noquear al retador y defender lo que tanto sacrificio le había costado obtener.
Como semipesado, su última derrota fue frente al futuro campeón mundial Harold Johnson en 1951. Luego intentó sin éxito ser el primer campeón semipesado en ganar el título de los pesados, pero Rocky Marciano primero y Floyd Patterson después, se interpusieron en su camino. Cuando el casi imberbe Clay lo despachó en cuatro rounds en 1962 era ya un recuerdo del extraordinario boxeador que se ganó un lugar en el Salón de la Fama de Boxeo con la que es quizás la mano derecha más temible de la historia del pugilismo. 131 cuerpos en su haber lo ponen fuera del alcance de cualquier otro.
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